Devocionales Cristianos – Fe es Acción y Movimiento

 

Tenés que moverte. El problema de los cristianos es que venimos, celebramos, escuchamos, danzamos, adoramos, oramos, pero no hacemos nada para alcanzar nuestro sueño. Tenés que pelear, dormir una hora menos, pero hacer, empezar a trabajar, a correr detrás de tus metas, a moverte, accionar.

Dios se mueve con los que se mueven, no con los que se quedan quietos. La nube en el Antiguo Testamento, que era la presencia de Dios, se movía y cuando se movía, el pueblo se movía y cuando la nube se detenía, el pueblo se detenía, porque Dios siempre se está moviendo. Dios quiere que hagamos cosas, que nos movamos con Él.

La ley del uso dice que todo lo que no uses te será quitado. Nada de Dios viene si no hay esfuerzo. Accióná. Para soltar el poder de la fe es preciso dejar nuestro pasado negativo. ¡Dejá lo que tenés atrás y mirá hacia adelante, proponéte metas y corré en pos de ellas!

No te detengas nunca. Detenerse es perder. ¿Te perdiste? ¿No sabés para dónde ir? No importa, seguí caminando porque a algún lugar vas a llegar. El secreto es moverse, porque a medida que lo hacés -no importa que no conozcas el rumbo- estás haciendo algo, estás liberando poder y no estás esperando que las cosas simplemente suceden por arte de magia.

Tu destino es el éxito y nadie lo puede cambiar.

El éxito es tu derecho de nacimiento. Dios nos hizo para el éxito y a los seres humanos nos cuesta creerlo -aun más que fracasar-, porque pensamos que no estamos preparados. Desde el día de tu nacimiento Dios te selló con éxito. Éxito es tu identidad, y todo lo que hagas será exitoso tarde o temprano.

El Señor te irá mostrando hacia dónde moverte, se abrirán puertas insospechadas, raras, y delante de ellas dirás: «Esto no tiene nada que ver con lo que oré, ni con mis dones, ni para lo que me preparé; me siento miserable, no lo voy a poder hacer».

Pero tendrás coraje y cuando atravieses estas puertas soltarás un potencial que no sabías que tenías. El Señor te dirá: «Entrá» y de allí saldrán las riquezas y los tesoros, el potencial que estaba escondido dentro tuyo esperando salir.

Éxito es tu identidad.

Podrás atravesar cualquier crisis, pero siempre en fe resurgirás. Hemos pasado situaciones difíciles, complicadas pero estamos acá y esa es la señal de que volvimos a levantarnos. Los exitosos se juntan con exitosos porque han resurgido, Dios les dio Su calor y se han vuelto a poner de pie para continuar con lo que Él comenzó.

Cuando decimos «eso es para mí», lo tomamos en fe y activamos esa palabra, el resultado es: recibirlo.

Te tomé de los confines de la tierra, te llamé de los rincones más remotos y te dije tú eres mi siervo. Yo te escogí, no te rechacé, así que no temas porque yo estoy contigo, no te angusties, porque yo soy tu Dios, te fortaleceré, te ayudaré, te sostendré con mi diestra victoriosa.

El Señor dijo: «Mi presencia está contigo y te daré descanso». Marcharé al frente de ti y allanaré las montañas, haré pedazos las puertas de bronce y cortaré los cerrojos de hierro, te daré los tesoros de las tinieblas y las riquezas guardadas en lugares secretos para que sepas que yo soy el Señor. En los últimos tiempos daré a vosotros de mi Espíritu, hombres y mujeres hablarán de mi parte, a los jóvenes les hablaré en visiones y a los ancianos en sueños pero yo salvaré a todos los que me reconozcan como su Dios.

La tierra que van a poseer es tierra de montañas y valles regado por la lluvia del cielo, el Señor su Dios es quien la cuida, los ojos del Señor su Dios están sobre ella del principio al fin. Pero el que se refugia en mí recibirá la tierra por herencia y tomará posesión de mi monte Santo.

No temas porque no serás avergonzada, no te turbes porque nunca jamás serás humillada. Nos moveremos en fe sin detenernos. Decretamos que saldremos rápidamente de las dificultades, entenderemos que cada día tiene su bendición, tomaremos estas palabras y no las soltaremos. Declaramos que seremos prosperados económicamente, que lograremos lo que queremos y aún más. No habrá escasez en ninguna casa y toda nuestra familia será bendecida.

Extracto del libro «60 Principios de Fe»

Por Bernardo Stamateas

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Psicólogo, docente, consultor familiar, conferencista y autor (Verdades Que Sanan, Desafíos Para Jóvenes y Adolescentes). Trabajé con la niñez y la formación de maestros de niños. Fui pastor de adolescentes y jóvenes por más de 10 años. En la actualidad me dedico a enseñar, escribir, dictar conferencias y dirigir www.devocionaldiario.org y www.desafiojoven.com, donde millones de personas son alentadas, edificadas y fortalecidas en su fe. Casado y padre de tres hijos.

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