Devocionales Cristianos – Intimidad con Dios

 

Pasaje clave: Juan 13:4-8, Marcos 14:12-17.

 

1. Introducción.

Intimidad con Dios puede ser un bonito lema que pronto olvidemos, o una desafiante decisión para cada día de nuestras vidas. Si es esto último, entraremos en una relación más profunda con Dios el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo.

En el relato de los evangelios era la época de Pascuas y era un tiempo muy especial para Jesús porque sería la última Pascua que celebraría. Por este motivo Jesús aprovecha para enseñarles a sus discípulos la importancia de tener mayor intimidad con Dios.

 

2. Jesús Desea Tener Intimidad con Nosotros.

A. Lucas 22:15. Jesús deseaba estar en intimidad con sus discípulos. Él quería tener ese tiempo personal y privado con ellos.

Hoy Jesús desea estar con nosotros. No sólo somos sus discípulos, somos hijos del Padre. Él quiere revelarse a nuestras vidas, quiere bendecirnos y que le conozcamos mejor.

B. Marcos 14:12. Pero de parte de los discípulos también estaba el mismo deseo. Ellos también querían estar con Jesús. Tener con él ese tiempo de intimidad.

Si deseamos estar en intimidad con Jesús buscaremos el momento y el tiempo para hacerlo. Cuando estamos en intimidad con Él recibimos de su presencia dirección, revelación y claridad para nuestras vidas.

 

3. Estar Limpios Para Tener Intimidad.

En el relato de Juan, Jesús lava los pies de sus discípulos. No los baña, solo lava sus pies. Porque los pies hablan del andar diario. En el caminar diario nos ensuciamos, nos salpicamos, nos manchamos. Y aunque ya somos hijos, justificados y santificados, necesitamos ser limpios en el día a día.

Jesús los limpia y purifica,  para que puedan tener “parte conmigo”.

Esta frase nos indica que solamente limpios y purificados nuestros corazones de todo pecado podremos estar en intimidad con él, sin nada que nos aleje ni nos acuse.

Limpios en nuestros corazones y limpios en nuestras conciencias.

No tengamos miedo de confesarle a Jesús lo que hemos hecho o lo que nos pasa. Él no quiere condenarnos sino que quiere perdonarnos y ayudarnos a volver a empezar.

Jesús conoce nuestros corazones y sabe por lo que estamos pasando. Como un amigo, él se saca el manto, se humilla para limpiarnos y para guiarnos a su presencia.

¿Estás dispuesto a arreglar tus asuntos personales con Jesús?

¿Estás dispuesto a renunciar a todo lo que te ensucia interiormente para tener intimidad con Él?

 

4. El hombre del Cántaro de Agua.

Marcos 14:13 y Lucas 22:10. En estos pasajes Jesús les dice a los discípulos que tenían que seguir a un hombre que llevaba un cántaro de agua. Ese hombre los guiaría a los discípulos hasta el dueño de la casa en donde celebrarían la Pascua.

¿A quién representa ese hombre? Ese hombre representa al Espíritu Santo.

Es el Espíritu Santo quien nos guía hasta la presencia de Dios.

Es el Espíritu Santo quien conoce a Dios y nos revela la Palabra.

Es el Espíritu Santo quien nos llena de paz y de amor para amar a Jesús.

Para tener intimidad con Dios necesitamos tener amistad con el Espíritu Santo. Tú y yo necesitamos ser amigos del Espíritu Santo.

 

5. El Dueño de la Casa.

Marcos 14:14 y Lucas 22:11. Estos pasajes nos presentan al dueño de la casa, el que tiene un aposento alto y privado. Ahí es donde Jesús quiere estar a solas con sus discípulos en la última Pascua.

¿A quién representa el dueño del aposento? Ese hombre representa a Dios el Padre.

En el relato Jesús emplea la palabra “Señor” para mostrarnos que el Padre tiene el poder en su casa. Es la cabeza, tiene dominio sobre todos. Él es la máxima autoridad. Todo lo que tenemos es de Él.

Y Jesús también usa la palabra “Padre de familia” para mostrarnos que el Padre ama a sus hijos, se relaciona con ellos y les provee. Dios es nuestro Papá.

Él nos provee, Él nos bendice, Él nos guarda. Él es el Padre de la familia.

Podemos conocer al Padre por medio del Espíritu Santo.

Podemos adorar a Jesús y amarlo por medio del Espíritu Santo.

Podemos ser amigos del Espíritu Santo.

Podemos tener una relación de intimidad con el Padre, el Hijo y el Espíritu.

¿Quieres conocer al Padre?

¿Quieres amar a Jesús y enamorarte de Él?

¿Quieres ser amigo del Espíritu Santo?

Es todo lo que necesitamos. Que éste sea tu año de Intimidad con Dios.

Por Edgardo Tosoni

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Psicólogo, docente, consultor familiar, conferencista y autor (Verdades Que Sanan, Desafíos Para Jóvenes y Adolescentes). Trabajé con la niñez y la formación de maestros de niños. Fui pastor de adolescentes y jóvenes por más de 10 años. En la actualidad me dedico a enseñar, escribir, dictar conferencias y dirigir www.devocionaldiario.org y www.desafiojoven.com, donde millones de personas son alentadas, edificadas y fortalecidas en su fe. Casado y padre de tres hijos.

8 Comentarios

  1. Dios les Bendiga;

    Justo es lo que necesitaba en este período de lucha, saber que tenemos un Padre más amoroso y cuidadoso que el que está en la tierra, que vale más que un amigo en la tierra, El es todo.

    Gracias Hermano Edgardo

  2. me gusta la claridad del mensaje,y lo hermoso que es tener en claro la hermosa amistad que uno puede tener con nuestro señor y lo bello de como solo Dios nos dejo la palabra y se cumple cuando dice que solo a sus hijos la revela, porque sino hay una amistad con el no hubieran tenido tal revelación y claridad de tal versículo el cual mucha veses uno puede leer pero no siempre interpretamos lo que el espiritud quiere revelar con tal claridad que hoy me a revelado su mensaje .nancy ,Santa Rosa La Pampa. Dios siga revelando su alimento para las iglesias del mundo y que su mensajes sigan edificando esa intimidad con Dios día a día bendicion

    • Hola Nancy. ¡¡Bienvenida!! Muchas gracias. Me alegra muchísimo que esta Palabra haya despertado tu deseo de tener mayor intimidad con el Señor.

  3. Magnífico reflexión sobre esta porción bíblica. Confieso que muchas veces lo he leído pero nunca lo había entendido así. Gracias a Dios por habernos dado su Espíritu para que por medio de Él podamos llegar al Padre y a su Hijo. Que bueno que el cuerpo del creyente haya sido escogido por Dios para morar en él a través de su Espíritu Santo, cuan hermoso y grande es el amo de Dios por sus Hijos que nos ha sellado con su Espíritu para indicar a todas las huestes espirituales de maldad de que somos su pertenencia y se nos debe respetar. No es maravilloso?

    Ovidio

    • Hola Oviedo. ¡¡Bienvenido!! ¡¡Sí, es maravilloso!! Es que así de espectacular y grandioso es nuestro Papá Celestial.

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