Devocionales Cristianos – La Protección de Asociación Limitada
Considerando de cómo las personas influencian mi vida, también he aprendido a proteger mi visión mediante una asociación limitada. Tal vez usted no quiere deshacerse completamente de alguna de las personas en su vida. Es importante, sin embargo, que usted con meditación y oración determine cuanto tiempo pasará con ellos.
Para aquellos de ustedes que están poniendo plazos, por tomen esto a pecho: Cuando usted tiene una meta para su vida, asegúrese que la persona en la que usted está interesado esté también interesado en sus metas. Muchas personas se casan y después le cuentan a su pareja de sus metas. Con frecuencia el esposo o la esposa dice: «Yo en realidad no quiero eso». La Biblia nos pregunta: «¿Andarán dos juntos, si no estuvieren de acuerdo(Amos 3:3). Jesús reafirmó este tema cuando dijo: «Una casa dividida contra sí misma, cae» (Lucas 11:17). Usted no quiere estar en una casa que está dividida. Usted quiere estar en una casa con una visión.
Está bien tener amigos provisionales el tiempo que usted lo considere. Pero usted no querrá pasar tiempo precioso con amigos provisionales. Está bien que pase dos o tres horas con la misma persona, pero no dos días. Está bien que pase dos minutos con la misma persona, pero no dos horas. Depende de la influencia que él o ella ejerza sobre usted.
Usted debe proteger su ambiente mental. Mire como puede hacerlo: Pase la mayor parte del tiempo con influencias positivas y el menor tiempo con influencias negativas. Aléjese de las malas situaciones. Pablo declaró este adagio: «Las malas conversaciones corrompen las buenas costumbres» (1 Corintios 15:53). Él nos estaba diciendo: «Seleccionen bien sus compañías».
Oración: Padre, me has dado la facultad de seleccionar bien a mi compañía. Ayúdame a continuar la selección de amigos cercanos que Te amen y Te busquen con todo el corazón. En el nombre de Jesús, amén.
Pensamiento: Pase el mayor tiempo con influencias positivas y el menor tiempo con influencias negativas.
Extracto del libro “Devocional Diario de Poder y Oración”
Por Myles Munroe