Finanzas – Autosuficiencia
“Te he hablado en tus prosperidades, mas dijiste: No oiré. Este fue tu camino desde tu juventud, que nunca oíste mi voz” (Jeremías 22.21).
Dios habla en todo momento, no solo en los difíciles sino también en los buenos.
Debemos buscar Palabra de Dios no solo en la adversidad, sino también en la prosperidad.
La mayoría busca para su negocio un consejo de parte de Dios cuando ya está fundida.
Si buscáramos Palabra de Dios y oyéramos su voz en los momentos prósperos de nuestra vida, seguramente nos evitaríamos muchos momentos difíciles.
No te olvides que, a mayor prosperidad se necesita tener mayor responsabilidad, y a mayor responsabilidad se necesita mayor sabiduría.
Junto con la prosperidad muchas veces aparece la autosuficiencia: “Yo sé lo que tengo que hacer”, “Yo tengo todo planeado”, “No necesito consultar a nadie, ni siquiera a Dios”.
Lo peor es que muchos siempre cometen el mismo error, una y otra vez, por eso Dios dice “desde tu juventud”, es decir, “Siempre fuiste igual, y nunca aprendiste que debes oír mi voz”.
Por favor, consultá al Señor en tu prosperidad para saber qué hacer con lo que él te está bendiciendo.
Por favor, aplicá los principios para administrar lo que Dios te da, también en la prosperidad, no solo en la adversidad.
Yo bendigo tu vida para que puedas erradicar de vos toda autosuficiencia y logres mantenerte humilde y dependiente de Dios en todo momento.
Por Daniel González
