Hombres Cristianos – Los Temores de tu Esposa 3

 

Continuemos.

Mientras oraba, pude percibir su deseo de vencer estas limi­taciones, y Dios me dio la sabiduría para estimularla constante­mente. Verter sobre ella elogios y ánimo, con el propósito de ele­var su nivel de confianza, dio el mismo resultado que irrigar una bella flor.

Cada vez que ella decía algo breve en un grupo pequeño, yo le señalaba cómo los demás habían recibido grandes bendiciones. Seguí diciéndole que la belleza que Dios depositó en ella se podía usar como inspiración para que otros confiaran en que Dios los ayudaría a vencer cualquier dificultad que enfrentaran en sus vi­das. Dios contestó tal oración, y vimos cómo comenzó a desbor­darse un caudal de vida que produce admiración y expresiones de gratitud por parte de millones de personas a través de América del Norte y los campos misioneros del mundo. Sinceramente creo, basándome en el testimonio de otras personas, que en la actuali­dad Betty es una de las personas más amadas y respetadas. Ella es una evidencia viva del poder de la oración. Debido a esta milagro­sa transformación en la vida de Betty Robinson, ¡millones podrán vivir en esta tierra vidas de plenitud, y luego por toda la eternidad, en presencia de nuestro gran Dios y Padre!

 

Oración de Poder.

Señor, te ruego que ayudes a (nombre de le esposa) para que «por nada esté afanosa» (Filipenses 4:6). Recuérdale traer en oración ante ti todas sus preocupaciones, para que tu paz, que sobrepasa todo entendimiento, resida permanentemente en su corazón. En específico te pido por (nombre de algo que a tu es­posa le dé temor). Te ruego que la liberes de ese temor y la con­sueles en este día.

Enséñame a reconocer las artimañas del enemigo, cada vez que intente robarle vida a mi esposa haciéndola temer y atormentándola. Me enfrento a todos los ataques del enemigo que sean dirigidos a mi esposa, y declaro que ningún espíritu de temor tendrá lugar en su vida. Fortalece su fe en ti, Señor, y sé su defensor.

Te pido que a (nombre de la esposa) no la atormente nin­gún temor humano. Permítele elevarse por encima de la crítica de los demás, y ser libre del temor a la opinión de otras perso­nas. Que su única preocupación sea complacerte a ti. A mi es­posa le digo: «Fortaleceos en el Señor, y en el poder de su fuer­za» (Efesios 6:10) «Con justicia serás adornada; estarás lejos de opresión; porque no temerás, y de temor, porque no se acerca­rá a ti» (Isaías 54:14). Permítele a mi esposa levantarse y decir: «Jehová es mi luz y mi salvación; ¿de quién temeré? Jehová es la fortaleza de mi vida; ¿de quién he de atemorizarme?» (Sal­mo 27:1).

Señor, dale a mi esposa fuerzas para pararse firme en medio de los tiempos difíciles de su vida. Sostenla con tu presencia para que nada la haga estremecerse. Permite que pueda elevarse por encima de las cosas que representan ser un reto para ella. Oro específicamente por la debilidad, lucha, tentación o necesidad más grande de mi esposa. Ayúdala a apartarse de todo lo que la tiente. A (nombre de la esposa) le digo: «No os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea humana; pero fiel es Dios, que nos os dejarás ser tentado más de lo que podéis resistir, sino que dará también juntamente con la tentación la salida, para que podáis soportar» (1 Corintios 10:13). «Aguarda a Jehová; esfuérzate, y aliéntese tu corazón; sí, espera a Jehová» (Salmo 27:14).

Señor, permite que mi esposa pueda soportar la tentación y que reciba la corona de vida que has prometido a todos los que te aman (Santiago 1:12). Dale a mi esposa paciencia, mientras espera respuesta a sus oraciones y que todas las cosas se cumplan. Ayúdala a esperar en ti en vez de esperar que las cosas cambien. Que solo te tema a ti, y que esté contenta donde se encuentra en este momento, sabiendo que tú no la dejarás allí para siempre. Perfecciónala en «tu perfecto amor» el que «echa fuera todo temor», para que el temor no encuentre lugar en su alma (1 Juan 4:18).

Extracto del libro “El Poder del Esposo Que Ora”

Por Stormie Omartian

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Psicólogo, docente, consultor familiar, conferencista y autor (Verdades Que Sanan, Desafíos Para Jóvenes y Adolescentes). Trabajé con la niñez y la formación de maestros de niños. Fui pastor de adolescentes y jóvenes por más de 10 años. En la actualidad me dedico a enseñar, escribir, dictar conferencias y dirigir www.devocionaldiario.org y www.desafiojoven.com, donde millones de personas son alentadas, edificadas y fortalecidas en su fe. Casado y padre de tres hijos.

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