Mujeres Cristianas – Autoestima Femenina 3
Continuemos.
A. Círculo del Fracaso.
Fracaso que lleva a la falta de valoración. Esfuerzos por agradar a otros o cumplir con las expectativas de otros. Críticas internas destructivas.
B. Círculo del Éxito.
- Valoración.
- Esfuerzos positivos que tienen que ver con seguridad interna.
- Sueños propios.
- Caricias internas constructivas.
Esto parece a simple vista sencillo, pero no es fácil ponerlo en práctica. Muchas mujeres no se dan a sí mismas la valía que necesitan para sentirse bien consigo y tomar medidas positivas, sino que se atacan, critican y regañan en la creencia de que la severidad es la mejor manera de motivarse hacia el cambio. Se «aguijonean» para alcanzar metas, están atentas a sus deficiencias y temen que si dejan de insistir en sus defectos, desistirán de tratar de mejorar.
Para ello utilizan horas y horas de su día pensando acerca de sus fracasos, sus defectos, y lo más interesante es que juegan en su mente con estos pensamientos frustrantes.
Tal vez te estés sintiendo así:
¿Utilizas tu energía para degradarte en lugar de utilizarla para enfrentarte a la situación y crecer? ¿Buscas el apoyo y la aprobación de los demás sin reconocer que es de ti misma de quien más necesitas aliento y aceptación?
¿Estás resentida con los demás por no valorarte, pero a pesar de ello, finalmente te culpas por no hacer más y por ser tan poca cosa?
¿Te dices a ti misma: «haz algo que impresione y entonces te aprobaré»?
Si has respondido afirmativamente quiero decirte que esto es tan inefectivo como decirle a una planta «primero crece y después te daré agua».
Tendemos a tratarnos a nosotras mismas como no nos atreveríamos a tratar a otras personas. Nos maltratamos con frases descalificadoras que nunca le diríamos a nadie. Consolamos a otros pero no podemos consolarnos a nosotras mismas.
2. Formas de Pensar Destructivas.
- Si otros me critican están en lo correcto. Han penetrado en mi corazón y en mi alma y han percibido mis carencias.
- Si la gente me elogia es porque se ha dejado engañar por mis capacidades aparentes. Cuando me conozca mejor, cambiará de opinión.
- No importa lo que logre. Importa lo que no he logrado.
- Si logré algo fue porque tuve suerte. Las veces que fallé o me equivoqué es porque soy ineficiente.
- Si no soy un éxito total, entonces soy un fracaso. No hay puntos medios, no hay aceptables, sólo hay fracaso.
La mujer se dice a sí misma «si no estoy a la altura de las expectativas que los demás tienen sobre mí o que yo misma tracé, entonces no valgo nada y no merezco nada».
Ellas idearon un estilo de vida que vieron o les enseñaron y todos sus esfuerzos apuntan a «cumplir» con ese estilo de vida; algo que produzca un cambio las frustra y las inutiliza.
3. Cómo Ganar Confianza.
A. Pongamos Nuestra Mente en Paz.
Si estamos enfrentando una decisión pequeña o grande pongámonos en paz primero y luego decidamos.
Si ese día no podemos tomar una decisión, entonces es evidente que no es tiempo de tomar esa decisión. Cuando sea tiempo, seremos capaces de hacerlo.
B. Pidámosle a Dios que nos Ayude a Pensar.
C. Dejemos de Abusar de Nuestra Mente.
La preocupación y la obsesión constituyen un abuso mental.
D. Alimentemos Nuestra Mente.
Démosle a nuestra mente una cantidad razonable de datos para poder escoger bien.
E. Alimentemos Nuestra Mente con Pensamientos Sanos.
Busquemos lecturas que nos alimenten. Aprendamos cosas nuevas: Interesémonos por el mundo que nos rodea. A veces estamos tan ensimismadas con nuestros problemas que nos hemos olvidado de nuestra capacidad de aprender. Formémonos, aprendamos, etc.
Dejemos de decir cosas malas acerca de nuestra mente: No digamos «no puedo tomar decisiones adecuadas», etc. Es más fácil decir cosas buenas acerca de nosotras, y por ahí empecemos a creer las cosas positivas y descubramos así que son verdaderas.
F. Usemos Nuestra Mente.
Formulemos opiniones, seamos creativas, no dejemos que nadie tome decisiones por nosotras.Dejar que la gente decida por nosotras significa que estamos siendo rescatadas, lo cual quiere decir que nos estamos sintiendo víctimas. No tomemos el rol de víctimas. Podemos sentirnos a gusto con nuestra mente. Llegar a conocerla, es parte de nuestra tarea para ser mujeres fuertes y valientes. Empecemos a confiar en nosotras mismas y en nuestra capacidad de pensar.
Extracto del libro “Mujeres Fuertes”
Por Alejandra Stamateas
buenisimoooo… me gusto, y aprendere mucho con ustedes
Hola Carolina. ¡¡Bienvenida!! De eso se trata… de aprender y crecer cada día. Éxitos.