Matrimonios Cristianos – El Lenguaje del Amor: Recibir Regalos 3

 

Continuemos.

Ese esposo pudo haber enviado una docena de rosas, pero eso no hubiera hablado tan alto como su presencia en el cuarto del hospital, junto a ella. Jan estaba completamente dolida por esa experiencia. El niño que nació ese día tiene ahora quince años, pero ella recuerda lo que pasó como si hubiera sido ayer. Lo comprobé más adelante:

—¿Sigue pensando que Don amaba más al fútbol que a usted, cuando eso sucedió?

—Claro que sí—dijo—. EI día del funeral de mi madre también estaba jugando fútbol. No podía creerlo. Mis hermanos y hermanas vinieron a mi casa, pero mi esposo estaba jugando fútbol.

Más adelante pregunté a Don sobre esos acontecimientos. Él sabía exactamente de lo que estaba hablando.

—Sabía que ella le contaría eso —dijo—. Estuve allí durante todo el tiempo, y cuando el niño nació tomé fotografías y estaba muy feliz. Ansiaba contarles a los muchachos del equipo, pero mi encanto se rompió cuando regresé al hospital esa noche. Ella estaba furiosa conmigo. No podía creer lo que me decía. Pensé que estaría orgullosa de mí por contárselo al equipo.

La presencia física en el momento crítico es el regalo más poderoso que usted puede dar, si el lenguaje principal de amor de su cónyuge es recibir regalos.

 —¿Y cuándo murió la madre de ella?

—Probablemente no le contó que tomé una semana libre antes de que muriera, y que pasé toda la semana en el hospital y en la casa de su madre ayudando. Después de que ella murió y el funeral terminó, sentí que había hecho todo lo que podía. Necesitaba un respiro. Me gusta jugar fútbol, y sabía que eso me ayudaría a relajarme y a aliviarme un poco del estrés. Pensé que ella hubiera querido que descansara un poco. Había hecho lo que pensé que era importante para ella, pero no era suficiente. Ella nunca ha dejado de recordarme esos dos días. Dice que amo al fútbol más que a ella. ¡Eso es ridículo!

Era un esposo sincero que falló en entender el tremendo poder de la presencia. Que él estuviera allí era para su esposa más importante que cualquier otra cosa. La presencia física en tiempos críticos es el regalo más poderoso que usted puede dar, si el lenguaje principal de amor de su cónyuge es recibir regalos. Su cuerpo llega a ser el símbolo del amor. Quite el símbolo y el sentido del amor se desvanece.

Si la presencia física es tan importante para usted, también es importante que usted lo haga saber. No esperé que él lea su mente. Si, por el contrario, su cónyuge le dice: «Quiero que estés conmigo esta noche…, mañana…, esta tarde…», tome su petición seria. Desde su perspectiva eso ni puede ser importante. Pero si no responde a la petición, puede comunicar un mensaje que bien no hubiera querido.

Un esposo dijo una vez: Cuando falleció mi padre, el supervisor de mi esposa dijo que ella podía tomarse dos horas para asistir al funeral, pero que tenía que estar de regreso en la tarde. Mi esposa le dijo que su esposo necesitaba su compañía ese día y que por lo tanto se tomaría todo el día.

El supervisor replicó: «Si se toma todo el día puede perder su trabajo».

Mi esposa le respondió: «Mi esposo es más importante que mi trabajo». Así que pasó el día conmigo. Ese día me sentí más amado que nunca por ella. Nunca he olvidado lo que hizo. Desde luego, ella no perdió su trabajo. Su supervisor pronto salió de la empresa y le pidieron que ocupara su lugar».

Esa esposa había hablado el lenguaje de amor de su esposo y él nunca lo olvidaría.

Casi todo lo que se ha escrito sobre el tema del amor dice que en el corazón del amor está el espíritu de dar. Los cinco lenguajes del amor, todos ellos, nos invitan a dar a nuestro cónyuge, pero para algunos, recibir regalos, símbolos visibles de amor, habla más alto.

Los regalos no necesitan ser costosos ni deben ser semanales, pero para algunas personas, su valor no tiene nada que ver con el dinero y mucho que ver con el amor.

Extracto del libro “Los Cinco Lenguajes del Amor”

Por Gary Chapman

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Psicólogo, docente, consultor familiar, conferencista y autor (Verdades Que Sanan, Desafíos Para Jóvenes y Adolescentes). Trabajé con la niñez y la formación de maestros de niños. Fui pastor de adolescentes y jóvenes por más de 10 años. En la actualidad me dedico a enseñar, escribir, dictar conferencias y dirigir www.devocionaldiario.org y www.desafiojoven.com, donde millones de personas son alentadas, edificadas y fortalecidas en su fe. Casado y padre de tres hijos.

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