Pensamientos – ¿A Ti te Bautizo?

 

Pasaje clave: Mateo 3:16-17.

Nada en su apariencia lo distingue de la multitud. Igual que el resto, está de pie en la fila, esperando su turno. Él, como los demás, puede oír a la distancia la voz del predicador.

Entre bautismos, Juan el Bautista se pone a predicar. Impetuoso. Feroz. Fiero. Intrépido. De piel bronceada. Con mechones sin cortar. Juan está con el agua hasta la cintura en el Jordán de color cobalto. Llama a todas las personas a entrar en el agua. «Él fue por toda la región contigua al Jordán predicando el bautismo del arrepentimiento para perdón de pecados» (Lc.3:3).

El bautismo no era una práctica nueva. Era un rito obliga­torio para cualquier gentil que deseaba convertirse en judío. Era para gente anticuada, de segunda clase, no escogida. No para las clases limpias, encumbradas y favoritas: los judíos. He aquí el problema. Juan se niega a hacer diferencias entre judíos y gentiles. A su modo de ver, todo corazón necesita una lim­pieza detallada.

Todos los corazones, es decir, excepto uno. Por eso Juan se asombra cuando ese uno entra al río.

Es comprensible la renuencia de Juan. Una ceremonia bau­tismal es un evento extraño para encontrar al Hijo de Dios. Este debía ser el bautizador, no el bautizado. ¿Por qué Cristo querría ser bautizado? ¿Por qué debería bautizarse?

He aquí la razón: Puesto que usted y yo no podemos pagar, Cristo lo hizo. Hemos roto mandamientos, promesas y, peor que todo, hemos roto el corazón de Dios.

Sin embargo, Cristo ve nuestra súplica. Debemos a Dios una vida perfecta. Perfecta obediencia a todos los manda­tos. No solo el mandamiento del bautismo, sino los de humildad, honestidad e integridad. No podemos cumplir. Pero Cris­to puede pagar, y lo hizo. Su zambullida en el Jordán es una representación de su zambullida en nuestro pecado. El bautismo de El anuncia: «Déjame pagar».

Con su bautismo usted responde: «Seguro que te dejaré».

Extracto del libro “3:16 Los Números de la Esperanza”

Por Max Lucado

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Psicólogo, docente, consultor familiar, conferencista y autor (Verdades Que Sanan, Desafíos Para Jóvenes y Adolescentes). Trabajé con la niñez y la formación de maestros de niños. Fui pastor de adolescentes y jóvenes por más de 10 años. En la actualidad me dedico a enseñar, escribir, dictar conferencias y dirigir www.devocionaldiario.org y www.desafiojoven.com, donde millones de personas son alentadas, edificadas y fortalecidas en su fe. Casado y padre de tres hijos.

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