- ¿Está bien tener sexo oral?
En todas las facetas de la vida cristiana, Dios nos llamó a vivir en libertad, dándonos como máximo mandamiento – no como opción – el amor; un amor tal, que los demás nos reconocerían por esta característica como cristianos en todas nuestras relaciones interpersonales.
Cuando hablamos de sexualidad, no podemos regirnos por «bien o mal», «bueno o malo» simplemente, sino por la ley del amor (que es superior). «Nunca haré algo que ponga mal a la persona más importante de mi vida». Si tu cónyuge está en desacuerdo con ésta u otra práctica, es suficiente para no hacerlo, porque el pecado consiste en faltar al mandamiento del amor y dañar al regalo que Dios te ha dado en la persona de tu cónyuge. Ahora, si para ambos es placentero, damos razones para desmitificar el tema y aportar luz.
William Cutrer, M.D. y Sandra Glahn en su libro «Intimidad sexual en el matrimonio» sugieren que Cantares 2:3 hace una referencia explícita al sexo oral.
El texto dice así: «Como el manzano entre los árboles silvestres, así es mi amado entre los jóvenes; bajo la sombra del deseado me senté, y su fruto fue dulce a mi paladar».
En Oriente el manzano suele ser un símbolo del amor sexual y en la literatura extrabíblica, la fruta se asocia en ocasiones con los genitales o el semen masculino, de modo que es posible que aquí tengamos una delicada referencia a una caricia genital-oral, que ella ha iniciado. El mismo autor da otra cita en Cantares 7:13 que dice: «Las mandrágoras han dado olor, y a nuestras puertas hay toda suerte de dulces frutas, nuevas y añejas, que para ti, oh amado mío, he guardado».
Las mandrágoras se llaman así porque recuerdan a los genitales del hombro comían para aumentar el deseo y la fertilidad. ¿Qué se hace con las mandrágoras y la fruta? Se meten en la boca. Este es un lenguaje de lo más provocativo.
Por otra parte, si usted le da un beso a su esposo en la boca no vemos por qué no puede dárselo en los genitales. Por mucho tiempo se relacionó lo genital con algo sucio, feo, desagradable. Pero en realidad es tan sucio como una boca sin lavar y existe el mismo peligro de contagio por la boca que por los genitales.
Por último, queremos insistir en que deben respetarse mutuamente y no hacer nada que al otro le ofenda. Si los dos están de acuerdo, pues practíquenlo con absoluta libertad; de lo contrario, absténganse por amor.
- ¿Cuántas parejas aceptan y practican el sexo oral?
El nuevo informe Kinsey señala que el 90% de las parejas casadas menores de 25 años lo practican.
Sólo el 3% del total de los hombres rechazan el contacto de su boca con Ios genitales de su esposa.
- ¿Mediante el sexo oral podemos contraer enfermedades?
Algunos muestran rechazo porque ven el contacto orogenital como vía de contagio para diversas enfermedades. Pero lo que se contagia por la boca se contagia también por vagina. Alex Comfort dice: «Los que son sucios son los genitales de la gente que no se lava, y en este caso el besarlos sí resulta desagradable. Como lo es besar en la boca a quien no se limpia los dientes».
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