3D Character (8)Artículos – Cosa de Locos

 

 

¿Será tarde para despertar? Mi abuela me decía, “el que se fue a la villa, perdió su silla”, dicho antiguo, si lo hay. El Apóstol Juan en Ap. 3: 11 dice, «…que ninguno tome tu corona» (lugar, diría yo) ¿A qué me refiero? Está pasando algo en mi Argentina. Robos, secuestros, muertes, inseguridad, libertinaje sexual, irreverencia, falta de fe, leyes que nunca hubiéramos pensado que se tratarían, ¡y las que vienen! Pablo lo diría de otra forma en 2º Tim. 3:1-9.

Año 1954. Argentina tuvo un gran avivamiento, miles de personas conocieron al Señor, luego vinieron hombres de Dios, de todas partes a ayudarnos en la evangelización. Aparecieron ministros nacionales que impactaron el país y habría que hacer un capítulo especial para nuestro evangelista Carlos Annacondia.

Reconozcamos que nos hemos “encerrados” en nuestros recintos con grandes congresos, de lo que sea. Ya somos expertos en demonología, en sanidad interior, en todo lo antropocéntrico, en teología y misiones y demás yerbas, pero… a la vez reconozcamos que hemos dejado un lugar que habíamos ganado. La calle.

Ahora muchas de nuestras propuestas es ganar a través de la política,  del comercio, del buen vivir, la música, el arte, de ser personas buenas, de grandes concentraciones para estar en contra de algo en las plazas, pero que no gravitan en la sociedad. No digo que no haya que estar en esos estrados, pero, no hay que dejar de hacer lo otro. ¿Y, que es?

Me acuerdo cuando nos llamaban locos. Y no nos ofendían, al contrario, nos desafiaba y motivaba  a seguir nuestra tarea.

El apóstol Pablo dice en 1º Co.1:18: “Porque la Palabra de la Cruz es locura a los que se pierden, pero  a los que se salvan,…es Poder de Dios».

Pablo desafía a tres grupos de personas. Sabios, (griegos), Escribas (religiosos) Judíos (creyentes nominales).

Sabios. No hay duda, la ciencia  aumentó de una manera considerable en estos últimos tiempos. Haber conquistado el espacio, ya es historia. Muchas de las enfermedades que eran “cuco” en el mundo, por ahora están controladas, pero la CIENCIA, con todo su poder, no ha logrado operar en el corazón del hombre. No lo ha podido transformar. No hay una salida científica para el adicto, para el vicioso, para el hombre o mujer de la calle, para el delincuente, para el orgulloso, ni aun para los problemas socioeconómicos diarios. El hombre sigue sobreviviendo con su pesada carga.

Escribas. Las distintas religiones que hay en nuestro país, nunca dieron una solución al alma hambrienta del hombre de hoy. Al contrario, hasta lo han apartado de Dios, aun llámese la religión evangélica. El evangelio, la vida de Jesús, no ha sido plasmado en la ciudad. Tal vez nuestras tradiciones y miedos a quedar mal, no hemos  soltado todo el poder de Dios, y solo queremos mostrarnos buenitos con obras sociales. (Que hay que hacer sin dejar lo otro)

Judíos. La fe de muchos se ha apagado o enfriado por causa de que sus deseos no son concretados. Al  menor de los problemas ha hecho que muchos de nuestros congregantes se hayan ido de nuestras iglesias. Nuestras reuniones se vuelven antropocéntricas en vez de Cristo céntricas, porque queremos darle atención a los que se reúnen con nosotros.

¿Cuál fue el mensaje o mandato del Señor? Pablo dice en 1º Co.1:21 que a Dios le agradó salvar, por medio de la LOCURA de la PREDICACION.  El Kerigma, la proclamación de la gracia, la justicia, el amor de Dios. En ese mensaje hay transformación, conversión de vidas. La sociedad tiene la respuesta a sus deseos más íntimos de su alma. Sé que hay que hacer todo lo otro, pero se ha dejado un gran espacio en la calle. Es por eso que la sangre corre por nuestras calles argentinas. Si volvemos a tomar nuestro lugar, tenemos que volver a las calles. Me encanta eso de pastorear a cada manzana de nuestro territorio, y saturarlas con el evangelio de Cristo. Allí vamos a descubrir las necesidades reales de la gente, me encanta ver carpas levantadas de se anuncia las buenas nuevas y las grandes campañas al aire libre donde se producen las salvaciones masivas. Es bueno ver cristianos hablando de su Señor casa por casa, en las escuelas, universidades, trabajos. Mis queridos pastores y iglesia del Señor, no dejemos que el mal crezca delante de nuestras narices, hagamos lo que sabemos hacer. Prediquemos la Palabra de Salvación. Tengo un sueño (como dijera M. L. King) que la iglesia de Argentina se pusiera de acuerdo solo un mes, dejando todos nuestros programas a un lado, y saliéramos a saturar con el evangelio todas las calles del país. Creo que realmente habría cambios en las estructuras más firmes de nuestra sociedad. Esto sería una cosa de locos. Prediquemos del Amor del Señor.

Por Juan Herrera

Pastor de la Iglesia Nueva Vida

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