Enseñanza Aprendizaje – Pasos de un Plan de Clases: La Motivación 3
Continuemos.
3. Use Audiovisuales.
Los objetos que se pueden ver, llaman la atención y capturan el interés. En un curso de preparación de maestros el instructor sacó de su maleta 3 o 4 zanahorias. Las hizo circular entre todos y les dijo: «Escriban diez maneras de presentar la zanahoria a niños de 8 a 10 años de edad». Después dijo: «Ahora piensen en diez maneras de presentar el Salmo 23 al mismo grupo de niños».
Otro maestro introdujo un estudio sobre la parábola del sembrador, regando un puñado de semillas de maíz sobre el piso y preguntó: ¿Crecerán estas semillas? ¿Por qué no? ¿Qué condiciones requieren para crecer?
Películas, cuadros, diapositivas, afiches, discos y casetes son una gran ayuda cuando se puede contar con ellas. Estos medios, como todos los objetos, no deben atraer la atención sobre sí mismos, sino arrojar luz sobre el asunto o tema que desea presentar.
4. Use Casos Hipotéticos.
¿Qué le parece este? Un maestro dijo a sus alumnos: «Imagine que usted tiene la oportunidad de servir como abogado defensor en el juicio de Dios contra Eva, ¿qué habría alegado a favor de ella en su defensa?»
¿Y este otro? “Sí usted hubiera sido uno de los miembros de la iglesia en Galacia que recibió la carta del concilio de Jerusalén diciéndoles lo que podían o no podían hacer, ¿cómo habría reaccionado?”
La idea es poner a los alumnos en una situación tal que deban pensar, resolver una situación y compartir sus respuestas. La Biblia está llena de casos donde usted puede, hipotéticamente, trasladar el problema a sus alumnos para que sean ellos los que lo resuelvan. Los beneficios son muchos y la participación, generalmente, es muy abundante.
5. Use Historias Dramáticas.
Las historias, por su carácter biográfico, tienen un enorme poder para estimular. Por ejemplo un episodio de la vida de Corrie ten Boom; Escenas de la vida de Nicky Cruz; Cuadros de personajes como Gabriela Mistral, Miguel Ángel Asturias, o del triste final de figuras como Rubén Darío o Ernesto Hemmingway. Estos y otros personajes del mundo moderno, que han pasado por experiencias dramáticas, ayudan a iniciar una clase con verdadero entusiasmo.
6. Use Citas Célebres.
Presente, escrita en un cartel o sobre el pizarrón, la frase famosa de alguien y pídales que expliquen su significado. ¿Qué le parece esta de Aristóteles que un maestro puso frente a sus alumnos? «El hombre es un animal político».
O esta que ofreció otro maestro: «Si usted no ora a Dios diariamente, la razón es muy simple: A usted Dios no le importa. Entre más pronto reconozca esta verdad, mejor».
Por supuesto, las frases o citas célebres que seleccione, deberán tener una relación con el tema del estudio. También deberá tener cuidado de seleccionar aquellas que realmente apelen a la mente y nivel de sus alumnos.
Algunas Palabras de Precaución:
1. Las técnicas para obtener la atención y motivar a los alumnos al Estudio Bíblico están limitadas solamente por la imaginación del maestro.
2. La introducción de la clase no es solamente para llamar la atención del alumno, sino también para guiarlo al estudio de la Biblia.
3. Si usted percibe que la curiosidad y el interés de los alumnos se desvía hacia otro tema, es el momento de interrumpir o corregir la actividad.
4. En la Guía para Utilizar el Plan de Clase se sugiere que el maestro, para motivar el aprendizaje, use una actividad que sea:
A. Centrada en la vida.
B. Interesante para captar la atención.
C. Que demande una respuesta de los alumnos.
D. Y que guíe directamente al estudio de la Biblia.
Genere actividades de motivación que cumplan con estas características y que se ajusten a las necesidades e intereses de sus alumnos.
Extracto del libro “Ideas Prácticas Para Maestros y Obreros”
Por Autores Varios
