Observaciones sobre el Plan de Clase
- Objetivos: Sugerimos no tener más de 3 objetivos específicos para la clase. Esos objetivos deben ser escritos de acuerdo a lo que EL ALUMNO debe ser capaz de saber, hacer, sentir, etc. al final de la clase. (Algunos maestros escriben objetivos sobre lo que ELLOS harán en la clase, pero eso no es correcto. El objetivo es la transformación de la vida del alumno). No toda clase incluirá todos los aspectos, “saber”, “sentir” o “hacer” (objetivos cognitivos, afectivos o activos, respectivamente) a pesar de que el maestro haría bien si siempre viera el impacto de la clase en estas tres categorías generales).
En la medida de lo posible, los objetivos deben ser:
- Mensurables
- Específicos
- Alcanzables
- Prácticos
- Breves
- Bíblicos (sugeridos por el texto)
- Material necesario: Aquí el maestro debe anotar todo el material de apoyo que va a necesitar, para evitar la vergüenza de llegar al punto crucial de la clase y descubrir que dejó un recurso principal en casa.
- Captación: Quizás el momento más importante de la clase son los primeros instantes en los que el maestro obtendrá los oídos o dispersará al grupo. ¡ESOS MOMENTOS TIENEN QUE SER PLANEADOS! La “casualidad” se volverá un caso de desastre. La captación es como un gancho, que atrae al alumno, levanta una necesidad real en su vida, y sugiere que Dios tiene una respuesta.
- Explicación: La explicación es el “cuerpo” de la lección, la transmisión de la esencia de la lección para aquel día. Anote aquí los diferentes métodos didácticos que el maestro pretende utilizar, y cuánto tiempo cada método o etapa de la clase va a exigir.
- Actividades del alumno: Quizás esta categoría sirva más para clases con niños pequeños, en el que algún trabajo manual y/o recreativo acompañe la clase. Pero las clases de adultos muchas veces pueden ser desafiadas con alguna actividad en conjunto que reforzará la idea central de la lección.
- Revisión/Recapitulación: Muchas veces la clase incluirá un resumen final o alguna actividad de recapitulación de la materia, teniendo como objetivo grabar su mensaje en la mente y en el corazón de los alumnos.
- Aplicación/Desafío final: Tal vez haya un proyecto específico que el Espíritu Santo coloque en el corazón del maestro y/o alumnos como resultado de la lección. Debe anotarse en ese espacio.
- Tarea: El maestro debe anotar las tareas que les dejará a los alumnos para que hagan antes de la próxima clase.
- Avisos: Muchas veces el maestro necesita recordarles sobre un evento social de la clase, alumnos enfermos y otros pedidos de oración, etc.
- Semana que viene: Anote aquí el asunto y cualquier “atractivo” de la próxima semana para crear expectativa en los alumnos para la próxima clase.
- Evaluación/Observaciones sobre la clase: Después de la clase el maestro debe anotar sus propias observaciones sobre lo que funcionó o no, cómo mejorar la próxima clase, etc. Después, el plan debe ser archivado en un lugar de fácil acceso para una futura ministración.
Preguntas para la discusión:
- ¿Cuáles son las razones por las que muchos maestros no preparan un plan de clase?
- En sus propias palabras, ¿cuáles son las ventajas de un buen plan de clase?
- Imagine que usted dará una clase sobre David y Goliat para preadolescentes. Intente generar 3 objetivos específicos para aquella clase.
- Enumere algunas maneras utilizadas para iniciar nuestras clases que NO sirven como captaciones.
- ¿En qué formas desperdiciamos tiempo en nuestras clases, especialmente cuando no tenemos un plan de clase elaborado?
Extracto del libro “101 Ideas Creativas para Maestros”
Por David Merkh y Paulo França
