Devocional – El Amor de Dios Nuestro Padre 2
Pasaje clave: Jeremías 31:3.
Tu Papá celestial te ama. Puedes saberlo por medio de la revelación de la Palabra y confirmarlo por medio de la muerte y resurrección de Jesús, como la máxima expresión del amor de Dios hacia cada uno de nosotros. Por lo tanto, nunca más vuelvas a sentirte “nadie”, ni a ser ninguna de las cosas que te han dicho o te han demostrado a lo largo de tú vida. Por fe, cree que eres alguien para el Padre y que Él te ama con su amor incondicional. Eres el/la amado/a de Dios.
¡En Cristo eres alguien nuevo! Y en él puedes vencer el temor de sentirte menos o inferior. Él está contigo en todo momento y su Espíritu de poder, amor y dominio propio habita en ti para ayudarte a enfrentar cada una de las situaciones de la vida (2° Co.2:14-15, 2°Tim.1:7). Ya no necesitas amar para sentirte amado. Tú verdadera identidad es esta: “Soy amado por Dios”.
También puedes conocer el amor de Dios:
1. Por medio de todas las cosas positivas y útiles que te suceden y a través de todas las bendiciones que recibes diariamente. Todas las bendiciones del Papá celestial son manifestaciones palpables de su amor incondicional para tu vida y los tuyos.
2. Y también puedes experimentar el amor de Dios por medio de aquellos que te aman sinceramente. Dios ha puesto personas a tu lado a través de quienes puedes descubrir el amor de Dios. En el abrazo, en el beso y en la caricia de quienes te aman, recibe y disfruta el amor incondicional de tu Papá celestial. Él te abraza, te acaricia y te besa con amor eterno.
Piénsalo.
¿Te sabes amado por Dios o dudas de su amor?
¿Disfrutas del amor de Dios sabiéndote incondicionalmente amado por él o te tratas como víctima y escapas de su amor?
¿Sientes el amor de Dios en aquellos que te aman de verdad?
Por Edgardo Tosoni