Estudios Bíblicos – En Comunión Unos con Otros

 

Un hijo de Dios necesita a otros hijos de Dios. Nos ayudamos unos a otros. Nos animamos, festejamos los grandes logros y nos apoyamos unos en otros en los tiempos difíciles. Los máximos logros los consiguen aquellos que permanecen unidos con un propósito en común.

 

Nuestra Comunión se Hace más Fuerte:

1. Cuando oramos unos por otros.

¿Por quiénes te comprometerás a orar esta semana?

 

2. Cuando nos perdonamos unos a otros.

¿A quién o a quiénes necesitas perdonar?

 

3. Cuando nos servimos por amor unos a otros.

¿Qué harás para servir a tus hermanos?

 

4. Cuando hablamos bien unos de otros.

¿Con qué palabras lo validarás y afirmarás?

 

5. Cuando nos amamos unos a otros.

¿De qué maneras prácticas les mostrarás tu amor?

 

6. Cuando nos cuidamos unos a otros.

¿Sobre quién o quiénes harás cobertura espiritual?

 

7. Cuando nos bendecimos unos a otros.

 ¿Qué bendiciones soltarás para ellos?

 

8. Cuando nos valoramos unos a otros.

¿Qué harás para mostrar el valor que tiene tu hermano?

 

9. Cuando nos edificamos con nuestras palabras.

Toda palabra que hablamos y que no edifica a las personas, las destruye, las lastima y nos divide. Chismes, quejas, ingratitudes, etc., solo provocan separación entre las personas. No las vamos a permitir.

Practiquemos el siguiente ejercicio:

“Ahora, cada uno de nosotros va a decir algo positivo de otro. Primero todos vamos a decir algo positivo de “Pepe”, después de “Carlos”, después de “María”, después de “Carla”, hasta terminar”.

Una vez que hemos terminado con todos, les preguntamos: ¿cómo te sentiste escuchando palabras de bendición?

Todos tenemos cosas positivas y negativas, buenas y malas, pero necesitamos conectarnos con lo mejor del otro. Busca las cosas buenas de la gente y confiésalas en positivo. Por ejemplo: “Eres próspero”, “Estás sano”, “Eres capaz”, “En el Señor puedes lograrlo”, “Eres un excelente padre”, “Eres una esposa maravillosa”, etc. (Efesios 4:29, Colosenses 3:9, 16-17 y 4:6.)

 

10. Cuando nos perdonamos mutuamente.

No estamos para jugar a los resentidos. Estamos para perdonarnos.

Estamos para reconocer nuestros errores y pedir perdón.

Estamos para vivir sanos interiormente, y todo lo que nos lastima y enferma debe ser perdonado y rechazado en el nombre del Señor.

 

11. Cuando oímos a las personas.

Tienes que oír más, interesarte en la gente. Una persona que se siente escuchada, también se siente especial y apreciada, y quedará agradecida porque le prestaste atención.

 

12. Cuando mostramos pasión en todo lo que hacemos.

A todo lo que hagas ponle pasión. Saluda con pasión, felicita a los demás con pasión, da una palabra con pasión, motiva a los demás con pasión. La pasión impacta a las personas.

 

13. Cuando compartimos palabras de revelación.

La palabra de revelación (la que viene de Dios, los principios de Dios) siempre fortalece el espíritu, y a un espíritu fortalecido no hay nada que lo pueda vencer.

Tu problema necesita una palabra de fe. El problema cuestiona a la fe: “¿Será verdad?”, “¿Y si Dios no me escucha?”, etc. Pero cuando creces en fe, tu fe cuestiona tus problemas, entonces te parás delante de la enfermedad, de la pobreza, del dolor y le decís: “No tienes poder sobre mi”, “No tienes dominio sobre mí”, “Mi familia será de Cristo”, “Seremos bendecidos y prosperados en todo”.

Creer y declarar la verdad de Dios afirmará nuestras vida como ninguna otra cosa.

 

14. Cuando restauramos y corregimos con amor.

A ninguno nos gusta ser corregido, pero cuando alguien que está más avanzado que vos te corrige (no el que está detrás tuyo porque ese no tiene autoridad para corregirte), tienes que dejarte corregir. Si esa persona te lo dice con amor, aunque te duela, te hará crecer.

 

15. Cuando nos desafiamos en la obediencia.

Si queremos que el cielo se abra, tenemos que pagar el precio de la obediencia a la palabra de Dios. Es o todo o nada. Obediencia total, si queremos bendición total. Tenemos que desafiarnos a vivir en obediencia todos los días de nuestras vidas.

Extracto del libro «MÓDULO 2: Programa Para Nuevos Miembros Me Afirmo en Cristo»

Por Edgardo Tosoni

 

ADQUIERE el e-book del MÓDULO 2 completo  (incluye 21 temas) en: http://mislibroscristianos.com/index.php?main_page=index&cPath=53. Incluye Módulo de trabajo para el alumno.

Artículo anteriorEstudios Bíblicos – TEMAS PARA NUEVOS CREYENTES 4
Artículo siguienteEstudios Bíblicos – TEMAS PARA NUEVOS CREYENTES 2
Psicólogo, docente, consultor familiar, conferencista y autor (Verdades Que Sanan, Desafíos Para Jóvenes y Adolescentes). Trabajé con la niñez y la formación de maestros de niños. Fui pastor de adolescentes y jóvenes por más de 10 años. En la actualidad me dedico a enseñar, escribir, dictar conferencias y dirigir www.devocionaldiario.org y www.desafiojoven.com, donde millones de personas son alentadas, edificadas y fortalecidas en su fe. Casado y padre de tres hijos.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingresa para comentar!
Por favor ingresa tu nombre