LA PERSONA TÍPICA NO TIENE LA CAPACIDAD EMOCIONAL PARA SOPORTAR PREDICACIONES LARGAS.
La palabra clave en esta sección es continuidad, o si quiere una alternativa: estabilidad. La continuidad trae descanso. Se lo aseguro. Antes de cambiar un programa por otro, consulte a muchos de los miembros de su staff. Hable con algunas de las ovejas de su congregación. Determine si es algo necesario, en lugar de regresar de ese evento donde usted se emocionó con algo nuevo y distinto. No todos los programas que vemos en otras iglesias los tenemos que armar en la nuestra. Ni hablar de saber si funcionará o no. La continuidad traerá descanso. Cuando al fin es tiempo de cambiar un programa porque ya no funciona o porque se ha encontrado algo mejor, hay que hacerlo. Pero que se haga de tal manera que no deje exhaustas a las ovejas.
Cuarto, no trasquile constantemente a sus ovejas. Se ha dicho, en son de broma, que algunos pastores lo único que quieren de las ovejas es su «lana». En México y otros países usamos esa palabra refiriéndonos al dinero. Aunque nos riamos de ello, es cierto que pareciera haber algunos pastores que solo están pide y pide dinero de sus ovejas en nombre del Señor. Cuidado. Siempre «trasquilándolas» para ver cuánto pueden dar es manipulación, y tarde o temprano esto cansa y lastima a las ovejas. Creo poder decir con la absoluta autoridad de la experiencia que una de las razones más nombradas por las que muchas personas dejan de asistir a ciertas iglesias es por sentirse víctimas de la presión que reciben de parte de sus pastores, quienes constantemente piden dinero y más dinero. Simplemente, cansa.
Como pastores, es importante que sepamos cuándo sí y cuándo no debemos pedir dinero y, sobre todo…, ¿por qué y para qué pedimos dinero? Hay que ser bíblicos, transparentes, y mantener un balance en este aspecto. Entiendo los principios de siembra y cosecha, y estoy de acuerdo en que Dios lo ha diseñado de una manera maravillosa mediante la cual las ovejas tienen el gozo de participar en la obra del Reino. Así debe ser. Ofrendar es adorar. Sin embargo, el excesivo y constante pedir está creando una tensión en las ovejas, que usted, como pastor, debe entender. Debemos medirnos y ser justos. Tenga el respeto suficiente por sus ovejas como para saber que la bendición de Dios en sus vidas no es solamente con el fin de que usted tenga más y más dinero para hacer más y más proyectos, por muy fabulosas y hasta heroicas que puedan ser algunas iniciativas. Sepa administrar la visión que Dios le ha dado de manera sabia, y no canse a sus ovejas.
DESCANSAR ES BÍBLICO, UN MANDATO DE DIOS Y BUENO PARA TODOS.
Quinto, no predique tan largo. He dicho en son de broma que a algunos pastores les gusta predicar la Palabra «eterna» de Dios. La persona típica no tiene la capacidad emocional para soportar predicaciones largas. Se hace tedioso, no sirve en la comunicación y, repito esta idea de nuevo: cansa.
Además, la mayoría de las personas no tienen la disciplina para estar sentadas por esas largas horas. Encima, aun los que estudiamos mucho, no tenemos la habilidad mental ni intelectual para entender y procesar tantos conceptos a la vez. El pastor tiene que saber medir su palabra para que sea digerible por toda la congregación. Si le gusta enseñar más, mi sugerencia es que comience un estudio entre semana al que puedan asistir todos aquellos que consideran tener una intelectualidad más robusta y desean o pueden soportar más contenido. Pero en la reunión general, el alimento debe ser adecuado a la mayoría de los presentes.
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