Mujeres Cristianas – ¿Será el Hombre de mi Vida? 5

 

Continuemos.

“Es tan bueno que parece que no es tan hombre”. No, no, los hombres buenos existen, son bien hombres y no son feos, ni tontos, ni pocos hombres, son bien hombres, lo que pasa es que vos tenés que tener otra mirada. Uno elige de acuerdo a la mirada que tenga, uno elige de acuerdo a la herida que tenga. Vos tenés que sanarte primero para que tu mirada sea una mirada correcta, vos tenés que tener una vida propia para no meterte en la vida del otro. Vos primero cuidá tu vida, saná tus heridas, armate una vida propia, tené tu agenda propia para que cuando encuentres ese hombre bueno, sepan que juntos van a obtener la bendición, la felicidad y los sueños que hay en tu corazón.

 

9. Los Hombres no Están Rotos y no Necesitan ser Arreglados por Mí.

Si a vos te gusto el hombre así y vos crees que vos estás sana y elegiste sanamente, porque el hombre no es violento, no te trata mal, no te versea, no te dice “las otras parejas no me entendieron y vos me vas a entender”, no. Si un hombre es sano y vos estás sana, y te gusta así, no quieras cambiarlo porque entonces estás traicionando el amor. Si vos querés cambiar a ese hombre que está al lado tuyo, es porque no querés a ese hombre, querés a otro. No traiciones esa relación, si vos elegiste ese hombre, te tiene que gustar así. Si vos te metes en la cabeza la gran ilusión que nos hacemos las mujeres, “cuando me case lo voy a cambiar”, no lo vas a cambiar nunca, porque nadie cambia sino quiere cambiar. Vos no podes cambiar a nadie, sacate eso de la cabeza.

“Que el hombre va a ser mejor cuando se comprometa, cuando se hayan casado, cuando tengan hijos…”. No. Si el hombre es así, va a seguir así toda la vida, y de viejo se le va a potenciar todo lo que tiene ahora, porque de viejo se potencia todo. Si vos fuiste buena, de vieja vas a ser una vieja buena, si fuiste mala vas a ser una vieja mala, si tuviste carácter podrido de joven, lo vas a tener de viejo. Si el hombre fue infiel a los 30, a los 70 ni te cuento. Vos no tenés que curarle las heridas a ningún hombre. Si él necesita curar una herida, si es física que vaya al médico, si es psicológica que vaya al psicólogo, si es espiritual que vaya a Dios. Pero vos no le podes curar las heridas a nadie.

Que no te atraiga el ser necesitada: “es que yo le cambie la vida, desde que está conmigo él es otra persona”, no. Si un hombre quiere crecer va a crecer por su cuenta, esté con vos o no esté con vos. Vos no tenés que sanarle las heridas, porque los hombres no están rotos, como las mujeres no estamos rotas, y si tenemos alguna herida tenemos que hacernos cargo nosotros mismos, no pedirles a los demás que nos sanen nuestras heridas.

 

10. No Hay Hombres Perfectos.

Como no hay mujeres perfectas. Cuando conoces a una pareja vos tenés que concentrarte en dos, tres, cuatro o cinco cosas que para vos son importantes, fundamentales e inamovibles y tenés que elegir una pareja de acuerdo a esos objetivos tuyos y no tenés que tranzar en nada. Si por ejemplo tuviste un padre alcohólico y vos sabes que te molesta el que un hombre tome alcohol, eso para vos es fundamental. Es una premisa fundamental conocer una pareja que no tome ni una gota de alcohol, y a la primera que la veas tomando alcohol sabés que esa pareja no es para vos, porque vos tenés tus premisas que son inamovibles.

Busca dos o tres cosas que para vos son importantes, y que si no las tiene no puede ser pareja tuya, y el resto pasan desapercibidas. Si el hombre no es alcohólico y es tu premisa más importante que no tome, y el hombre no toma, y realmente decís “no le gusta tomar”, y es muy importante eso para vos, bárbaro; si después pone el papel higiénico mal, deja la pasta de dientes, esas son pavadas que se pueden pasar por alto, que no son graves porque no te lastiman. Pero hay ciertas cosas que para vos son muy importantes y vos no las podés dejar pasar. Si vos decís “yo no quiero que esta persona tenga estas características”, tenés que primero respetarlas vos, porque si vos lo tenés bien en claro, vas a ir en busca de un hombre que cumpla esos requisitos.

(CONTINÚA…)

Por Alejandra Stamateas

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Psicólogo, docente, consultor familiar, conferencista y autor (Verdades Que Sanan, Desafíos Para Jóvenes y Adolescentes). Trabajé con la niñez y la formación de maestros de niños. Fui pastor de adolescentes y jóvenes por más de 10 años. En la actualidad me dedico a enseñar, escribir, dictar conferencias y dirigir www.devocionaldiario.org y www.desafiojoven.com, donde millones de personas son alentadas, edificadas y fortalecidas en su fe. Casado y padre de tres hijos.

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