Sermones Cristianos – El Siervo Inútil Siempre Pierde 3
Continuemos.
D. Duerme… Una Siesta.
Imagino que durante el tiempo que el señor tardó en regresar, el siervo perezoso e irresponsable tendría una sola actividad: dormir.
Siempre me han gustado mucho los refranes o dichos. Para esta sección tengo uno que es bastante conocido y dice: «Camarón que se duerme, se lo lleva la corriente».
En Mateo 25 podemos leer el relato de las vírgenes insensatas que no tenían sus lámparas listas para el momento en que apareció el novio. A través de este relato el Señor nos habla fuertemente sobre la necesidad de estar alerta, vigilantes y a la expectativa de Su regreso.
Muchas de las señales que vemos en nuestros tiempos son manifestaciones de la inminente Segunda venida de nuestro Señor Jesús. Tanto a usted como a mí nos corresponde tener aceite en nuestra lámpara para recibir al novio.
Constantemente necesitamos hacernos preguntas difíciles como: «Si el Señor regresara esta misma noche ¿estoy listo para recibirlo?». Si se presenta cualquier duda al respecto, es necesario deshacernos de esta característica del siervo inútil y preparar nuestra lámpara para recibir al Maestro.
No sea que en alguna de las «siestas espirituales», el Señor lo sorprenda con su regreso, y lo encuentre fuera de la fiesta de bodas. Aún si el Señor no viniera en alguna de nuestras «siestas espirituales», lo que usted y yo podemos perder a manos del enemigo debería alertarnos a la necesidad de siempre estar preparados y a la expectativa. Es verdaderamente triste ver la cantidad de hombres y mujeres a los que se los llevó la corriente, simplemente por no estar en estado de alerta. No permita que su talento se adormezca. Despiértelo con actividad.
E. Excusa… Sus Acciones con un Buen «Rollo».
«Pero llegando también el que había recibido un talento, dijo: Señor, te conocía que eres hombre duro, que siegas donde no sembraste y recoges donde no esparciste; por lo cual tuve miedo, y fui y escondí tu talento en la tierra; aquí tienes lo que es tuyo» (Mateo 25:24-25).
Como no tenía nada qué hacer, el siervo inútil se pasó todo el tiempo diseñando este gran «rollo» de discurso que le dijo a su señor cuando regresó a pedir cuentas. No puedo imaginar la cara que habrán puesto las personas que estaban a su alrededor, mientras él «discurseaba» de tal manera.
Al leer este «alegato» podemos entender la magnitud de la ignorancia de este siervo. En breves palabras quedó claro que este hombre no había desarrollado su «materia gris» y que lo poco que tenía le servía sólo de relleno para que su cabeza tuviera forma. ¡Qué impresionante!
Muchas personas, en lugar de buscar soluciones a sus desafíos, buscan excusas. Espero que usted no sea como ellas. Deshágase de la mentira de las excusas, asuma sus responsabilidades y multiplique los dones que Dios ha puesto en su vida.
Recuerde lo que establecimos: Dios ha dado a CADA UNO talentos. Todos tenemos la bendición, el privilegio y la responsabilidad de hacer crecer los dones y las habilidades que Dios nos ha regalado. Si en este momento es poseedor de un sólo talento, inviértalo, hágalo crecer y con el tiempo tendrá dos. Entonces invertirá esos dos, y luego de un tiempo tendrá tres, y así irá creciendo. No hay límite para incrementar todos y cada uno de los talentos que Dios ha puesto de nosotros.
El siervo negligente presentó excusas sobre los talentos que no supo negociar y multiplicar. Pero el Señor le dirá: «Apártate de mí». El no usa flojos ni los necesita.
El Siervo fiel siempre gana Es necesario que nuestros talentos sean desarrollados, debemos tomar conciencia de ello. Puesto que es necesario que estemos preparados para abrir agujeros en la oscuridad que hoy tiene el mundo.
Y recuerde: EL SIERVO FIEL SIEMPRE GANA.
Extracto del libro “Cómo Desarrollar Mis Talentos”
Por Marcos Witt