Estudios Cristianos – Visión, Propósito y Producción 2
Continuemos.
Tu Comienzo Es la Prueba de Tu Realización.
Dios quiere que tú «veas» la realización o terminación de tu visión por medio de conocer que Él ya la ha planeado y establecido aun antes de que tú nacieras. El hecho de que tú comenzaste es prueba de que tú estás completamente realizado debido a que Dios siempre termina las cosas antes de que El comience algo, y siempre cumple Sus propósitos divinos. Por lo tanto, en lugar de estar luchando para tratar de cumplir lo que Dios te ha dado para hacer, tú puedes depender en El, en el hecho de que Él lo va a terminar a medida que tú le permitas guiarte en los puntos específicos con relación a cómo llevarlo a cabo.
Por ejemplo, a medida que yo avanzo en el desarrollo del ministerio de Bahamas Faith Ministries International, yo no estoy tratando de «terminarlo». Dios ya ha terminado un centro de entrenamiento para líderes de primera clase a nivel mundial, incluyendo todos sus detalles, tales como la Asociación de Líderes del Tercer Mundo, y el Liderazgo a la Vanguardia. Él ya los terminó en la eternidad, y ahora, Él está haciendo que esto llegue a existir. Él lo propuso, y entonces, El regresó y dijo, «Ahora, voy a ir a una pequeña isla en las Bahamas y voy a llamar a un joven que vive en una pequeña casa de madera y que forma parte de una familia de once hijos, para que él pueda comenzar el proceso de realizar esta visión». El proceso es la manera de Dios de prepararme y de preparar a aquellos que están involucrados en BFMI para que lleguemos al resultado final.
Tú no eres un experimento. Dios nunca hubiera permitido que tú comenzaras tu vida y tu propósito a menos que estos ya estuvieran completamente terminados y realizados en la eternidad. Tú naciste para manifestar algo que ya está completamente realizado y terminado.
Tú debes darte cuenta, sin embargo, que tu final no se parece en nada a tu comienzo—y tampoco se parece a ningún otro punto intermedio del proceso también. Esta es la razón por la cual tú debes vivir por fe, mirando hacia delante y buscando aquello que Dios ya ha terminado; de otra manera, tú vas a creer sólo en aquello que tú ves con tus ojos físicos en lugar de creer en la visión que tú ves en tu corazón.
En este punto, yo quiero hacer bien clara la diferencia entre propósito y visión.
El propósito es la intención para lo cual te creó Dios, es la razón de por qué naciste. El propósito es aquello que Dios ya ha decidido en Su propia mente y que tú estás supuesto a comenzar a realizarlo. Por lo tanto, el propósito es cuando tú sabes y entiendes aquello para lo cual tú naciste.
La visión es cuando tú puedes ver esto en tu mente por fe, y puedes comenzar a imaginártelo.
Cuando tú eres capaz de ver tu propósito, tu visión cobra vida.
Me gusta definir visión como «la visión es previsión con perspicacia y profundidad, basada en la retrospección». Tenemos perspicacia y profundidad dentro del propósito de Dios para nosotros, basados en que sabemos que Dios ya la terminó en la eternidad. La visión es un destello de nuestro futuro que Dios ya propuso.
No sabemos todos los detalles acerca de cómo es que nuestro propósito se va a desarrollar, pero podemos ver sus «detalles finales» porque Dios nos los revela a nosotros por medio de las visiones que Él nos ha dado. Esta es la razón de por qué podemos estar confiados que sí se van a llegar a cumplir.
Supongamos que tú no tienes el dinero que se necesita para realizar tu visión. De hecho, Dios te dice: «Yo ya he estado donde tú vas, y tú vas a contar con todo aquello que tú necesitas». Él nos dice que nuestras visiones se van a realizar, y esto es lo que nos da el valor y el coraje, y evita que nos entristezcamos cuando las cosas se ven como si nunca se van a poder realizar.
Tú Fuiste Diseñado Perfectamente para Realizar y Completar Tu Propósito.
Cuando Dios te creó con un propósito, Él también te diseñó perfectamente para que seas capaz de realizarlo. Esto significa que Él te preparó en una manera específica para que tú pudieras tener todos los componentes necesarios para poder cumplir la visión que Él te dio.
Tú nunca tienes que preocuparte por el hecho de que seas capaz o de que no seas capaz de cumplir o realizar la visión de tu vida. El hecho de que tú fuiste creado para realizarla significa que tú ya posees todo lo que se necesita para cumplirla. Dios siempre nos da la habilidad para hacer cualquier cosa que Él nos pide.
Extracto del libro “Los Principios y el Poder de la Visión”
Por Myles Munroe