Nuevos Juegos sexuales para combatir el aburrimiento
- Una sesión de besos.
- Erotice la habitación. Cambie de lugar los muebles, cuadros y adornos. Agregue espejos, alfombras. Compre luces especiales. Traiga flores, ponga buena música.
- Dedique exclusivamente un tiempo a la conversación con su pareja.
- Utilice una hora de masajes mutuos con cremas o aceites.
- Pase una noche en un hotel.
- Ensaye una nueva posición sexual.
¿Cómo puedo ser más atractiva?
- Mejore su cuidado personal.
- Vaya a la peluquería.
- Hable bien de su esposo en público.
- Sea divertida.
- Sea cariñosa con él.
¿Cómo puedo ser más atractivo?
- Luzca interesante: juegue con la mirada, haga entender por gestos que está atento.
- Sea cortés: arrime la silla para su esposa, dígale un cumplido frente a otras personas, refiérase a ella como lo más importante en su vida. Alguien dijo una vez que el amor tiene poca memoria. Necesita que lo estén recordando continuamente. Le hará bien recordarle a su esposa que la ama. Nunca se canse de decírselo, pues ella nunca dejará de apreciarlo.
- Mejore su aspecto físico: cuide su cabello, su barba o bigote, mantenga buen olor. A nadie le gusta el olor a «patas» o la ropa interior sucia.
- Optimice su estado de ánimo; aparte de hacerlo sentir bien, descubrirá que el buen humor da sabor a la vida.
¿Qué nos excita?
Tanto el hombre como la mujer pueden ser excitados en cualquier momento y de maneras muy diversas (caricias, olores, sonidos, fantasías, pensamientos, etc.).
Pero el estímulo más fuerte es el tacto, debido a las terminaciones nerviosas de la piel y otros tejidos más profundos que son responsables de las sensaciones. Cuanto más terminaciones nerviosas presente una zona, mayor sensibilidad. Y las zonas erógenas o productoras de amor son las que tienen más cantidad de terminaciones nerviosas, a saber: el glande del pene, el clítoris y los labios menores en la mujer, la zona alrededor del ano, el ano mismo, la parte interna de los muslos, los pechos, especialmente los pezones; el cuello, la boca y las orejas. Estos son sitios que, estimulados convenientemente, provocan sensaciones específicas.
Pero, ¿cómo respondemos al estímulo sexual?
¡Cuidado! Porque aun cuando la sensibilidad es muy exquisita y la zona altamente receptiva al estímulo sexual, «no existe respuesta automática»; es decir que no puedo esperar cierta respuesta tocando un determinado lugar como si fuera un botón mágico de respuesta instantánea; el cuerpo humano no es una máquina con opción a elegir el programa que queremos, porque las experiencias anteriores y actuales limitan, condicionan y determinan la respuesta. Dicho de otro modo, si la disposición, si los sentimientos, van en contra de la estimulación erótica, no habrá respuesta positiva.
Un ejemplo: si antes de hacer el amor discutió con su cónyuge o recibió alguna noticia negativa, lo más probable es que, a pesar de toda la estimulación, usted no presente respuesta positiva; porque quedó bloqueada por sus sentimientos anteriores de frustración, enojo u otros.
¿Cómo aumentar el deseo del uno por el otro?
Se habla de «erotizar a la pareja»; para ello, cada uno:
- Destaque lo positivo del carácter y del cuerpo de su cónyuge.
- Exprese con palabras y cumplidos estos aspectos positivos
- Dedique tiempo y energía a construir el matrimonio, el hogar depende de ello.
Además:
.Planifiquen juntos actividades que uno de los dos disfruta; luego a la inversa. Por ejemplo: si al esposo le gusta la pesca, organicen un día para los dos solos y, luego, si a ella le gustan las compras, vayan otro día juntos para ello.
.Sean novedosos en todos los aspectos; una cuota de novedad da sabor fresco al matrimonio, aun de décadas.
¿Qué cosas estimulan el deseo sexual?
- Buenos recuerdos de experiencias sexuales anteriores.
- Capacidad de fantasear con su pareja.
- Buena relación afectiva entre los cónyuges.
- Buena salud.
- Variación e intensidad de estímulos eróticos.
- Amor romántico.
- Cortejo, coqueteo, seducción.
- Pareja atractiva.
- Ausencia de pensamientos o sentimientos negativos.
Nota: El deseo sexual es más difícil que se altere en varones jóvenes y es fácilmente alterable en varones mayores y en mujeres de cualquier edad.
¿Qué es la frigidez?
Este término suele utilizarse peyorativamente en las mujeres que no tienen orgasmo. Pero por las connotaciones negativas que tiene, Masters y Johonson han propuesto en lugar de frigidez, el uso de «disfunción orgásmica», la que puede ser: absoluta, situacional o aleatoria.
Helen Kaplan propuso la palabra frigidez sólo para designar aquellos trastornos con ausencia total de respuesta sexual en la mujer; en otras palabras: no tiene deseo, ni excitación; no hay lubricación, ni puede llegar al orgasmo.
Extracto del libro “Sexo. Lo que siempre quisiste saber”
Por José Luis y Silvia Cinalli