Devocionales Cristianos – El Origen Del Primer Reino
Pasaje clave: Hebreos 1.
Primero Dios.
En primer lugar, es esencial que entendamos que antes de la existencia de todo, existe Dios.
La palabra Dios denota a alguien “que existe por sí mismo y que es autosuficiente”, y describe a un Ser que no precisó de nada ni de nadie para existir. Por lo tanto, “Dios” no es un nombre sino más bien una descripción de un carácter o naturaleza. Por causa de quién o de lo que es, solamente Él califica para el título de Dios.
Este Dios totalmente independiente existía antes de todas las cosas y comenzó su proceso creativo primeramente produciendo todo el mundo invisible, el cual también hemos llegado a conocer como “supra” o “por encima” del mundo natural. Este acto de creación dio inicio a los conceptos de “gobernante” y “gobierno”, ya que el Creador se convirtió en el regente de todo lo creado. Otra palabra usada para gobernante es rey. Dios llamo a la dimensión o dominio invisible “cielo” y se constituyó como Rey sobre ese dominio del cielo.
Ese fue el principio y la creación del primer reino llamado “el Reino invisible de Dios”. También se introdujo el concepto de reino. Este concepto de “reino” es vital, esencial, necesario, requerido e imperativo a fines de entender el propósito, la intención, la meta y los objetivos de Dios y de la relación de la humanidad con Él y con la creación.
Motivación Divina Para la Creación
No es absurdo pensar ¿por qué Dios, el Rey del cielo, querría crear hijos a su imagen y un universo visible? ¿No estaba acaso satisfecho y complacido con un Reino invisible de ángeles y potestades sobre las cuales gobernar?
Creo que la respuesta a estas preguntas radica en comprender la naturaleza de Dios mismo. Hay mucho acerca de ese Ser tan asombroso y autosuficiente que aún no sabemos, no conocemos y jamás podremos llegar a conocer, pero Él ha revelado lo suficiente de sí mismo a la humanidad como para permitirnos tener una vislumbre de algo de la magnificencia de su naturaleza y carácter.
Una de esas características es que “Dios es amor” (1º Juan 4:8, 16). Por favor, observe que no dice que El “tiene” amor, sino que Él “es” amor. Esa es una diferencia importante, ya que si Dios es amor, entonces sus acciones serán natural o sobrenaturalmente la manifestación de la naturaleza de ese amor.
Una de las cualidades más obvias del amor es que tiene que darse y compartirse. De ser así, entonces la misma naturaleza de Dios seria desear compartir su reinado y gobierno. En esencia, el amor es pleno cuando se da y se comparte.
Es esta naturaleza inherente de amor la que motivó al Rey de los cielos a crear hijos espirituales (llamados “humanidad”) para compartir el gobierno de su Reino. En otras palabras, el hombre fue creado con el propósito de gobernar y liderar. Esa es la razón por la cual en el mensaje de Jesús, cuando Él describió la era del Reino de Dios y su provisión para el hombre, su indicación fue que este Reino le pertenecía al hombre antes de que la Tierra haya sido creada.
“Entonces dirá el Rey a los que estén a su derecha: ‘vengan ustedes, a quienes mi Padre ha bendecido; reciban su herencia, el reino preparado para ustedes desde la creación del mundo” (Marcos 25:34)
Fue idea de Dios compartir su Reino invisible con sus hijos a los cuales Él llamó humanidad, y les dio su naturaleza y características.
Extracto del libro “Redescubriendo el Reino”
Por Myles Munroe