“Las riquezas y la gloria proceden de ti, y tú dominas sobre todo; en tu mano está la fuerza y el poder, y en tu mano el hacer grande y el dar poder a todos” (1 Crónicas 29.12)
Dios es el que da el poder para hacer las riquezas. El Señor domina sobre todo y por encima de toda situación o circunstancia. En su mano está la fuerza y el poder. Y también el hacer grande y dar poder a todos.
Esta palabra de bendición también te incluye a vos y a tu familia, y no te excluyas de poder experimentarla en tu vida. Yo no creo en el evangelio de la prosperidad, pero sí creo en la prosperidad del Evangelio.
Cristo vino para que tengas vida y vida en abundancia, y eso también incluye el área material. No te olvides que las riquezas y la gloria proceden de Dios, y Él tiene el poder para hacer que crezcas y te desarrolles en tu vida.
Que en este tiempo puedas experimentar la grandeza del Señor, no solo en la creación, sino en tu forma de vivir, logrando cosas grandes para su Gloria y tu crecimiento.
Este es tiempo de reconocer que las riquezas, la gloria y la grandeza proceden de Dios, y dejar de buscarlas en otro lado.
Necesitamos volver a la verdadera fuente de provisión, y buscar en ella la verdadera bendición, sabiendo que es el lugar correcto en donde se encuentra.
Yo bendigo tu vida para que puedas experimentar la mano poderosa de Dios, buscando en Él, que es la verdadera fuente de bendición.
Por Daniel González
